Durante todo su proceso de enfermedad y muerte atravesé los pasos más comunes de negación y culpabilidad. Después de lograr reconciliarme conmigo misma y con Dios, logré respirar de una manera más profunda y libre, viviendo Su Voluntad en mi vida con amor, no con resignación. Mi fe en Él me aseguraba que toda esta dura historia era lo mejor, era un regalo.
A pesar de esta profunda convicción de aceptar los designios de la Vida, la terrible incertidumbre de saber qué hubiera pasado si...?, cómo se sentirá alzar a un hijo (a)? cómo será dar de mamar? y la difícil tarea de enfrentar a otras personas que sí podían disfrutar a su hijo (a) fueron alimentando en Carlos y en mí la fuerte necesidad de darnos el chance e intentarlo otra vez.
Tras recibir asesoría médica y obtener el aval de mi nuevo doctor, cinco meses después de haber partido Vale, recibimos la tan esperada noticia: Estaba embarazada por segunda vez!
El embarazo se desarrolló de manera normal, y poco tiempo después nos enteramos que, nuevamente, tendríamos una niña. Confieso que fue difícil no preocuparme de que fuera a repetirse la misma historia. Sin embargo, optamos por celebrar la vida de nuestra bebé día a día, desde que estaba en mi vientre, por el tiempo que Dios quisiera.
Han pasado tres años ya, desde el nacimiento de María Fernanda, una niña alegre, cariñosa, pícara y con un toque especial... tiene una hermanita en el Cielo.
Sus constantes preguntas acerca de Valeria, sus lágrimas al escuchar su historia y sus comentarios de cuánto anhela poder jugar con ella, nos han hecho conmemorar la vida de Valeria y su presencia espiritual entre nosotros con mucha más fuerza.
Sé que para ella ha sido difícil comprender su realidad, sin embargo el amor se ha encargado de ser lo suficientemente creativo como para que ella se sienta amada y acompañada por su hermana desde el Cielo.
El tiempo dirá y Dios tendrá dispuesto cuándo llegará el día en que Mari Fer pueda experimentar la presencia física de un nuevo hermano (a).
Nuevamente, la incertidumbre despertará, tal y como la primera vez, pero continuaremos confiando en Dios y celebrando que se cumpla Su voluntad en nuestras vidas, pase lo que pase, siempre se traducirá en amor.
Vale y Mari Fer, entre Cielo y Tierra from Carol Garro on Vimeo.
Deseo que llegue el tiempo verde, que broten las flores en mi alma, que la ausencia de mi niña no me duela tanto. Quiero levantarme oler de nuevo el perfume del aire en primavera, que olía cuando llevaba a Raquelita conmigo.
ResponderEliminarNo puedo evitar llorar y llorar, es muy doloroso, desprenderse obedientemente de su cuerpo en mi brazos.
Está muy bello el video.
Besos, Ale
Que te puedo decir...duele porque el nacimiento y vida de nuestros hijos tenía que ser para nuestro siempre, para nuestro siempre. Eran ellos los que tenían que llevarnos flores a nuestras tumbas, sacar nuestras fotos y recordarnos como aquellos viejillos necios, sobre chineadores de sus hijos, de nuestros nietos...
ResponderEliminarYo conocí a un hombre bello, alto, humano, ciudadano responsable pero libre, felíz, buen hijo, excelente padre, cariñoso abuelo... un hombre que aun en la época en que viviría sería todo un caballero, dandoe la mano al mundo, removiendo su sombrero ante las damas en su camino. Ese hombre fue Julian, el Julián que yo me formulé en la canbeza desde el día que supe que esperaba otro varón.
Lo veía en el jardín destrozando las rosas, correteando al perro, llenando la cocina de chocolate, corriendo detrás de tu mariposa Maria Fernanda. Lo veía llegando tarde a casa cuando adolescente, escapándose de la clase de religión, como yo ´solía hacerlo, enamorándose y yo curando su primer corazón roto...
Pero no fue así. Julián no pasó del año y 7 meses, y en ese tiempo, congeló su desarrollo en su 3er mes. Y no comió su chocolate, y no jugói con los carritos de su hermano, y no dió sus primeros pasos. Pero nos llenó de tanto amor, de tanta magia, de tanta esperanza.
Hoy espero que este hombre, ese muchacho, ese niño y ese bebé, correteen por las nubes en companía del resto de chicos de Renacer, que tienen todos un poquito de lo que yo esperaba de Julian.
TE AMARE SIEMPRE JULIAN, TE EXTRAÑARÉ SIEMPRE, TE LLORARÉ SIEMPRE, AL MNENOS ESO TENGO...
Ale y Connie, queridas amigas,
ResponderEliminarTenemos una parte nuestra en el Cielo, y llevamos una parte del Cielo en nosotras. Poco a poco la luz llegará, ya ha ido mostrando algunos destellos...
Entonces, a pesar de la tristeza profunda con la que debemos aprender a vivir, podremos caminar, mirando al frente, con el corazón, inundado de esperanza y repleto del amor de nuestros hij@s. Tengo la fe de que ese día llegará...
Las quiero mucho!
Besos y abrazos!
Yo suelo llamarlo "Vacío de Amor". Sentía que me había quedado con todo el amor de mi hija Rebeca en las manos y sin saber que hacer con él. Con el tiempo me he dado cuenta que se apreden qué hacer con él poco a poco.
ResponderEliminarMe encanta esa manera de celebrar la vida de tus hijas. Me emociona pensar en lo que es Fernanda, cómo se perciba a sí misma, cómo ve la vida, etc... ella está creciendo con esta identidad de tener una hermanita en el cielo y unos padres agradecidos con Dios y con la vida.
Ayer estaba escuchando música y por los ultimos dos años, me ha gustado mucho escuchar la música que Rebeca escuchaba. Pero ayer, me puse a pensar en el origen de Rebeca, de dónde salió, cómo resultó ser la persona que fue y entonces fui un poco más atrás, a mi vida, mi propio origen y crecimiento. Entonces, vi la conexión espiritual que nos une. Llevan la marca indeleble de lo que aportamos en su vida para que sean lo que son.
Carol y Carlos, tengo que confesarles que desde el viernes en la noche vi el video, llore, llore y llore, con ganas y no pude escribirles nada, no pude ni tocar el teclado, me temblaba todo.
ResponderEliminarPero hoy quiero decirles que Valeria y María Fernanda tienen unos padres que cada día nos impresionan más a Roberto y a mí, ustedes son maestros en el amor, tenemos tanto que aprender de ustedes. Tienen una Familia hermosa y se puede poner más hermosa...por aquello de los que vengan!!!
Los queremos mucho, un abrazo a los cuatro
Silvia y Roberto,
ResponderEliminarCuando nuestros hij@s se marchan y caemos en este inevitable y temible vacío es difícil ponerse en pie por nuestra propia cuenta.
Rebequita, protagónicamente, ha estado con ustedes en este duro proceso, los ha visto llorar y desesperarse.Especialmente ella, que vive dentro de sus corazones, conoce cuánto dolor existe, cuánta desilusión y cuántas preguntas sin respuesta se repiten día con día.
Pero lo que más ha podido percibir es cuánto amor le tienen y cuánta fe han sostenido, a pesar de las malas noticias y los desalientos.
Rebequita tiene una mamá y un papá maestros en la fe, la esperanza, la perseverancia. Rebequita es fruto de todo eso y mucho más.
Amigos, de sus corazones no sale algo diferente. Su princesita se refleja a través de ustedes, mirándolos… conocemos a Rebeca.
Amamos con dolor, experimentamos el regalo de amar hasta que duela, vivimos el amor a plenitud y ahora somos responsables de que este trascienda, de que esta amarga cruz se convierta en vida... Y por más inalcanzable o utópico que parezca, nos hemos ido dando cuenta que la vida nos puede sorprender a cada instante, y nos impulsa a seguir adelante, poco a poco... La compañía de una mariposa en el camino, cada amanecer, el amor de la pareja, la posibilidad de sostener el proyecto de familia, todo esto se irá sumando y gota a gota el color de las lágrimas cambiará, y lograremos renacer.
Nuestro dolor tiene que multiplicar el amor y ustedes, amigos, ya han empezado este proceso.
Los queremos muchísimo!
Carito: ¿Qué puedo decirte que ya no te hayan dicho? Sabes el amor tan profundo que tenemos por ustedes 4. Un amor extraño, que nació hace años y que ahora nos ha unido más. Dios sabe cuándo suceden las cosas, y creo que este es el momento que Él escogió para juntarnos de nuevo. ¡Gracias por la forma tan especial que tienes de compartirnos tu vida! ¡Están en mi corazón y mis oraciones!
ResponderEliminar¡Los Quiero Muchísimo!
Es demasiado, sin querer brotan e mis ojos lágrimas de, son varios sentimientos encontrados que no puedo explicar, pero solo sé que la etraño y que doy gracias a sus padres por haberme dado la oportunidad de ser parte de esta historia y este reflejo de amor... Los Amo familia Castro Garro....
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